HISTORIA DEL AGUARDIENTE (MAGDALENA, COLOMBIA)
Desde el siglo XVII estaba construido un caserón colonial llamado “El Pozo de la Noria” ubicado en la vía que conducía a Santa Marta-Gaira, esta casa contaba con bodegas de añejamiento y un profundo pozo. Aquí funcionaba la Real Administración de Aguardiente, que para el año de 1780, era una de las mejores fábricas que durante muchos años dio enormes ganancias al gobierno; a tal punto que con el impuesto de esta fábrica de licores, fue que se terminaron las obras de la Catedral y el Seminario de Santa Marta.